Remontada con dedicatoria
“La remuntada va per a tots vosaltres”. -Alexia Putellas, capitana del FC Barcelona a su afición después de haber ganado la Champions, dedicando así, el título a las y los culers que tuvieron la disposición de volver a intentarlo después de lo ocurrido en la final de Turín.
¿Acaso quedaba duda? Ser del Barça es incondicional, solo era necesario que todas las partes que lo conforman recargaran energías para volver aún más fuertes. Vaya que así fue, una vez más pintaron de blaugrana el escenario del partido más importante a nivel de clubes y aún estando por debajo en el marcador, eran los cánticos del equipo español lo que más se escuchaba en el PSV Stadion.
Jugar enfrente de gente que te apoya del 0’ al 90’ es como salir al campo con un 11+1, aquí la razón por la cual la escuadra que estuvo presente en aquella final perdida, sentía que más que a nadie, el título se lo debían a la afición. Lo dejaron todo en la cancha y con una remontada histórica, cumplieron su promesa.
Aitana trajo a las suyas de vuelta a la última instancia siendo la mejor jugadora del torneo, Caro hizo todo en su poder para ganar la segunda, Alexia volvió en el momento justo para poder disputar el encuentro y coronarse dentro del campo, Mapi tuvo el honor de darle a la copa el abrazo que tenía pendiente y Jonatan Giráldez pudo disfrutar la victoria junto a su esposa y su bebé que nació días antes.
Estaba escrito, tanto que incluso el marcador coincide con una teoría creada meses atrás. La teoría del dos, que si bien surgió por coincidencias, se volvió tan grande que las jugadoras se subieron al barco y la tomaron como un impulso más para ser campeonas en Eindhoven.
Esa conexión tan grande entre futbolistas y seguidores es lo que precisamente hace que el Barcelona sea “més que un club”. Es un equipo que se ha ganado los corazones de millones de personas, por su estilo de juego tan característico, por sus valores, en realidad hay muchas razones. Es una institución que decidió apostar por el femenil y traer a las mejores del mundo, por eso el récord mundial de asistencia lo tienen ellas, están marcando un antes y un después.
Viéndolo como una aficionada al fútbol, me hace muy feliz haber podido confirmar que el fútbol da revanchas. No pudo ser contra el Lyon en 2022, pero sí contra el Wolfsburg en 2023. Fan del Barça o no, tuvimos el privilegio de presenciar una de las mejores finales que ha habido, partidazo de principio a fin.
¿Qué se dijo en el vestuario blaugrana en el medio tiempo? Que había que confiar en que eran capaces de cambiar el rumbo del partido. Ir perdiendo 2-0 no es fácil y menos en una final, pero lo que ya te pasó una vez, no te pasa dos. Esta vez el equipo llegó con convocatoria completa, descanso y enfoque apropiado. En Turín aprendieron a levantarse y no dar nada por perdido, en Eindhoven lo pusieron en práctica y así termina una travesía de dos temporadas, con la copa de vuelta en casa. Las historias que nos regala el fútbol sí tienen finales felices.