El desafío de ser madre y futbolista
El rol de la mujer en la maternidad ha sido históricamente influenciado por las expectativas de la sociedad, que a menudo han llevado a que las mujeres sean vistas como las principales cuidadoras en la crianza de los hijos. Sin embargo, muchas mujeres buscan equilibrar la maternidad con sus carreras y aspiraciones personales, desafiando así las expectativas tradicionales de género.
En el contexto del fútbol femenino, es importante destacar que ser madre no debería implicar abandonar los sueños y aspiraciones deportivas. Muchas futbolistas han enfrentado la preocupación de que la maternidad podría poner fin a sus carreras, pero la realidad es que esto no tiene por qué ser así.
Es importante entender que las futbolistas, pueden ser madres y continuar con su carrera en el fútbol. Ellas merecen apoyo continuo, tanto durante el embarazo como después del parto, lo que significa recibir entrenamientos adaptados y cuidados específicos para mantener su bienestar. Ser madre y futbolista no debería llevar a juicios ni prejuicios. Las deportistas que eligen seguir persiguiendo sus sueños y ser madres al mismo tiempo merecen respeto por sus decisiones. Además, estas mujeres pueden convertirse en modelos a seguir para futuras generaciones, desafiando los estereotipos y demostrando que es posible lograr el equilibrio entre la maternidad y el deporte. Para que esto sea una realidad, es necesario que los clubes se comprometan a brindar apoyo constante, permitiendo que las futbolistas se reincorporen al campo poco a poco.
Estudio de FUTPRO y Antecedentes
Un estudio realizado por FUTPRO sobre la maternidad en el fútbol femenino en España revela que el 46% de las futbolistas profesionales tienen temores relacionados con quedar embarazadas y las posibles represalias de sus clubes. Estos datos resaltan la importancia de asegurar que las futbolistas se sientan respaldadas en todas las etapas de sus vidas, incluso si deciden ser madres en algún momento.
En dicho estudio proporciona información valiosa sobre cómo algunas partes del mundo han avanzado mucho en la protección de las futbolistas durante el embarazo. Un buen ejemplo de este progreso proviene de los Estados Unidos.
Según el artículo 9.8. Beneficios del embarazo, del acuerdo de negociación colectiva de Estados Unidos:
“a) Una Jugadora que no pueda prestar los servicios requeridos en el SPA de la jugadora, como resultado del embarazo de la jugadora, recibirá el cien por ciento (100%) del salario base que la jugadora habría recibido bajo el SPA, si la Jugadora hubiera prestado los servicios requeridos. La NWSL mantendrá todos los seguros a los que tiene derecho la jugadora en virtud de este Acuerdo durante este período, de conformidad con los términos de los documentos del plan. Una jugadora que no pueda prestar servicios como resultado de un embarazo deberá proporcionar una nota del médico a la NWSL que describa las limitaciones de la jugadora. b) La jugadora recibirá el salario base y cualquier seguro por la NWSL para el que esté inscrito, de acuerdo con su SPA, como se establece en el párrafo anterior, por el período más corto de: (i) la duración de la incapacidad de la jugadora para desempeñar servicios como resultado del embarazo; o (ii) el término restante del SPA de la jugadora. “
Enmiendas al Reglamento sobre el Estatuto y Transferencia de Jugadores (RETJ) - FIFA:
El Consejo de la FIFA, en la sesión celebrada el 4 de diciembre de 2020, aprobó significativas enmiendas al Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores (RETJ) relacionadas con el fútbol femenino, que entraron en vigor el 1 de enero de 2021. Los clubes de los campeonatos femeninos reconocidos por la FIFA, deben garantizar:
Baja por maternidad de 14 semanas (8 obligatorias tras dar a luz).
Derecho a cobrar 2/3 del salario durante la baja.
Derechos de la jugadora durante el embarazo:
Seguir prestando su servicios como jugadora o prestar otros servicios (a su elección)
Determinar de manera independiente la fecha de inicio de la baja por maternidad
Retomar la actividad futbolística tras la baja por maternidad
El club tiene obligación de poner a disposición de la jugadora un lugar para amamantar al bebé o extraerse leche.
La rescisión de un contrato por embarazo o durante la baja por maternidad se considerará sin causa justificada (indemnizaciones art. 17 RETJ).
Si las condiciones del convenio colectivo nacional son más favorables, prevalecen estás frente a las del RETJ.
Futbolistas que equilibraron la maternidad y el fútbol
Ahora, nos adentramos en las historias de las futbolistas que han demostrado que ser madre y futbolista es posible. Estas mujeres han roto barreras y estereotipos, demostrando que pueden brillar tanto en el campo como en la maternidad. Entre ellas se destacan nombres como, Alex Morgan, Irene Paderes, Melanie Serrano, Julie Ertz, Amel Majri, Sara Björk, por mencionar algunas. . Estas mujeres han brillado en el campo y, al mismo tiempo, han abrazado la maternidad con determinación y valentía. Sus historias nos muestran que es posible alcanzar el éxito en ambas facetas de la vida.
Un caso que merece ser mencionado es el de Sara Björk. Esta futbolista hizo historia al convertirse en la primera en ganar un reclamo basado en el Reglamento de Maternidad de la FIFA. Su caso, resuelto por la Cámara de Resolución de Disputas de la FIFA, estableció un precedente significativo en la protección de las futbolistas durante la maternidad. La sentencia confirmó que Sara tenía derecho a cobrar su salario completo durante todo su embarazo y hasta el inicio de su permiso por maternidad, lo que marcó un hito importante en la conciliación de la maternidad y el fútbol.
La maternidad no debe ser un obstáculo para las futbolistas. Las políticas de apoyo a las jugadoras embarazadas son un paso adelante, pero aún se necesita trabajo. Todos los clubes deben adaptarse para garantizar que las futbolistas tengan igualdad de oportunidades, sin importar si son madres o no. El futuro del fútbol femenino debe ser un camino hacia la igualdad, donde todas las jugadoras puedan seguir sus sueños en el campo y en la maternidad sin tener que elegir entre ellos.