Ensayo y error
No ha habido, ni habrá conocimiento que surja a través de la generación espontánea, ya que tanto la ciencia, como el empirismo, cimientan su éxito en un proceso que inicia con el cuestionamiento, continúa con la creación de hipótesis y termina con los resultados que se obtengan al final del ejercicio.
Es evidente que no todos los descubrimientos científicos han obtenido el éxito que se esperaba de ellos; por el contrario, el ser humano es falible por naturaleza y el fracaso es inherente a nuestra existencia. Es por eso que, si existe una forma de evolucionar como humanidad, es mediante el reconocimiento del error, como una fase decisiva en la búsqueda del aprendizaje constante.
El pasado lunes 27 de septiembre, la cadena deportiva TUDN hizo oficial el nacimiento de un nuevo proyecto que lleva por nombre “Ellas en TUDN”. Dicho nombre hace alusión al esfuerzo que dicha cadena llevará a cabo para ofrecer un formato de transmisión interactivo, en donde se puedan apreciar varios partidos de la Liga MX Femenil de forma simultánea.
Al principio, la iniciativa fue planteada como algo innovador y nunca antes visto en la historia del deporte en nuestro país. Sin embargo, este tipo de transmisiones ya se habían observado años atrás, cuando en la última jornada del torneo regular del futbol varonil se jugaban todos los encuentros a la misma hora. Lo anterior únicamente pone en evidencia que, en esta ocasión, como en muchas otras, Grupo Televisa revivió un formato que ya había utilizado con anterioridad.
Aquí es donde encontramos el primer pecado de TUDN, cuyo reciclaje de contenidos no suma en absoluto en la búsqueda de alcanzar una nueva era en la comunicación deportiva de nuestro país. Aunado a lo anterior, la presencia de personajes que no aportan otra cosa, más que comentarios sensacionalistas y que dan como resultado la polarización de la sociedad, así como el poco conocimiento que algunos demuestran en las transmisiones de los partidos, tienen a la industria mediática sumida en una profunda crisis que parece no tener final.
Por otro lado, este proyecto comete el error de no otorgar la importancia que merece cada partido de la Liga MX Femenil. La cantidad de personas (entre jugadoras, árbitras, cuerpos técnicos y personal de la liga) que trabajan para que un partido de carácter oficial se lleve a cabo, es considerable y, sobre todo, merecen respeto.
Las y los que toman decisiones en TUDN tienen la falsa percepción de que cantidad supera calidad y que, el hecho de tener a varios equipos en pantalla y al mismo tiempo, significaría alcanzar niveles muy altos de rating. El problema es que olvidaron un detalle muy importante: la modernidad ha traído múltiples opciones para que la afición pueda consumir deportes desde otras plataformas, las cuales no necesariamente son medios tradicionales de comunicación.
La respuesta de la afición se dio de inmediato y las quejas emergieron a través de los principales canales de comunicación que unen la televisora y a su público. La inconformidad fue evidente y las quejas sobre la transmisión se contaban por centenas. En particular, las y los aficionados de Tigres Femenil mostraron su descontento por las deficiencias que hubo durante todo el partido, ya que experimentaron retrasos en las jugadas y los goles no pudieron apreciarse en vivo.
A pesar de que las redes sociales le dieron oportunidad a la afición de externar su sentir sobre las deficiencias del proyecto “Ellas en TUDN”; desafortunadamente también nos encontramos con comentarios fuera de toda proporción, como los que aseveraron que Tigres Femenil era el único equipo que generaba interés y que los demás estaban solamente de relleno.
Si bien es cierto que el equipo de Nuevo León es el más mediático de todo el país, la crítica sesgada ayuda en poco y nada al ascenso y eventual consolidación del futbol femenil en México. Es fundamental tomar en cuenta que ninguna lucha es más importante que otra y que las exigencias pueden venir desde cualquier trinchera, no importando el equipo con el que se tenga mayor conexión.
Es innegable que TUDN ha realizado una labor muy importante para darle foco al futbol femenil mexicano. Sería ilógico decir que sus esfuerzos han sido en vano y no han aportado a la conversación. No obstante, en esta ocasión su iniciativa no fue la más afortunada y tendrán que aprender de sus errores.
Esperemos que la soberbia, que ha caracterizado a Grupo Televisa a lo largo de su historia, sea desechada por completo y comience un proceso de autocrítica que identifique las malas prácticas, asimile los errores, los entienda como parte fundamental del ser humano y así pueda corregir el camino para que en un futuro ofrezca contenidos a la altura de una liga profesional de futbol.