Las súper águilas
El deporte es un concepto tan complejo que se compone de diversos factores que lo hacen posible y lo hacen parte fundamental de la vida de los seres humanos. Afición, medios de comunicación e incluso patrocinadores forman parte de una estructura que hace posible que el negocio del deporte persista a través de los años.
Pero sin duda su elemento fundamental y sin el cual simplemente sería imposible su existencia, sin duda son las y los atletas. El protagonismo del atleta es relevante pues son las y los encargados de construir las historias y los triunfos que quedan grabados en la memoria de las personas.
Hablemos de futbol y de la importancia que le damos al triunfo en ésta y en la demás disciplinas. Generalmente, cuando nuestro equipo gana, lo demás pasa a segundo término. Ganar se ha convertido en una obsesión y algunas veces perdemos de vista otros factores que son igual o aún más relevantes que el triunfo mismo; hablamos de la construcción de un proyecto económicamente sustentable, el apoyo a la generación de futbolistas o incluso la creación de un estilo de juego que se replique dentro y fuera de la institución que lo instauró.
Éstas son tan sólo algunas de las virtudes que el Club América ha buscado introducir a su modelo deportivo y cuya principal arquitecta es Claudia Carrión. La llegada de Carrión se dio en 2020; época caracterizada por un reinado absoluto por parte de los equipos de Nuevo León y en donde las águilas vivían una crisis institucional alimentada por la falta de títulos.
Tras dos años de gestión y después de una experiencia poco favorable con Craig Harrington al frente del equipo, Carrión consiguió un acuerdo con Ángel Villacampa, entonces técnico del Levante de España.
En tan sólo un año como Director Técnico, Villacampa ha logrado llevar a su equipo a dos finales consecutivas; levantando el título en el Clausura 2023 ante el equipo de Tuzas.
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Aunado al enorme trabajo táctico que han realizado Villacampa y su equipo de auxiliares, el plantel que ha conformado la directiva ha favorecido al futbol ofensivo que las águilas despliegan partido a partido. Entre los fichajes más importantes que han llegado a Coapa durante la gestión de Carrión están el de la portera Itzel González, Andrea Pereira, Aurelie Kaci, Natalia Mauleón, Sarah Luebbert, Scarlett Camberos, Kiana Palacios, Katty Martínez y Alison González.
Las jugadoras que ha reunido la directiva azulcrema fueron protagonistas en sus anteriores equipos. Pero no sólo estamos ante figuras de talla mundial, como Pereira y Kaci, la plantilla de las águilas está conformada por jugadoras mexicanas que han portado la camiseta nacional en diversas ocasiones. Lo anterior es el claro reflejo de una estrategia enfocada a tener un plantel con muchísima calidad, pero al mismo tiempo llenarlo de experiencia para garantizar una mejor toma de decisiones, sobre todo en momentos apremiantes como las liguillas, etapa en donde el América solía fallar de forma recurrente.
La conformación de un plantel tan competitivo no es una tarea fácil. De hecho, es un trabajo que requiere tiempo, pues no sólo se trata de tener los recursos económicos para hacerte de elementos competitivos; es labor de la directiva evaluar las necesidades del equipo y de esta forma desarrollar un plan para ofrecer una oferta de crecimiento profesional para las posibles candidatas a reforzar el equipo.
Una vez que las negociaciones llegan a buen puerto, el compromiso es del Director Técnico para responder de forma satisfactoria a la ardua tarea que representa la consecución de un fichaje, sobre todo si hablamos de una jugadora de alto nivel. En este sentido, la labor del técnico debe estar enfocada en hacer de la competencia una constante en el día a día del equipo y mantener la motivación a tope de todas y cada una de sus jugadoras.
Ante este escenario, la perfección pareciera ser sinónimo del futbol que practica el América; sin embargo, es justo la humildad la que ha caracterizado a Villacampa y su enorme capacidad para identificar los puntos flacos de su equipo y corregirlos con trabajo y disciplina.
Ahora bien, la reciente derrota ante Tigres en el marco del Campeona de Campeonas no debe representar un problema mayor para las águilas, ya que el proyecto que han fincado durante varios años no apunta a ganar un título nada más; por el contrario, pareciera que aprendieron la lección del 2018 y ahora su objetivo es construir un equipo deportiva y económicamente solvente, el cual sirva de modelo para otras instituciones y, sobre todo, marque una época en el futbol de nuestro país.