El futuro es hoy
Fotografía: Selección Nacional de México Femenil
El pasado 4 de junio, México enfrentó a Estados Unidos en la final del Campeonato de la Concacaf Sub-20. La transmisión comenzó 10 minutos antes para quienes lo vimos por televisión, cosa que no ocurre con los partidos de sus similares varoniles y es un área de oportunidad para las televisoras de paga para que respeten los tiempos de transmisión, especialmente cuando se trata de nuestra Selección.
Analizando un poco a las convocadas para el Campeonato Femenino Sub-20 de la CONCACAF 2023, parece raro que no hubiera jugadoras de Chivas, quienes son referente por jugar sólo con mexicanas, pero en este mundo globalizado cada día más competitivo y con el crecimiento de las ligas dentro y fuera de nuestro país, hay mejores oportunidades de elegir talento. Es importante reconocer que el fútbol femenil en Estados Unidos ha obtenido resultados porque ha establecido bases desde el fútbol formativo y su nivel de competencia ha hecho que la Selección Mexicana voltee a ver a las jugadoras mexicoamericanas desde hace varios años, permitiendo que las jugadoras de la liga mexicana tengan que elevar su nivel para ser consideradas y representar a su país.
En la convocatoria de las 21 seleccionadas que participaron en este torneo, únicamente siete provienen del fútbol estadounidense y una de un equipo español, lo que confirma que hay nivel en la Liga MX Femenil para estar a la altura del torneo.
El pase al mundial estaba asegurado desde antes de comenzar el partido, pero esta generación dirigida por Ana Galindo, quien es pieza fundamental del equipo, sabe que hay que jugar todos los partidos como si fueran finales. ¡Hay que ir a ganarlos! Y así fue.
Dos goles contra uno fue el marcador final contra Estados Unidos, con quienes había una revancha pendiente. Pasaron cinco años para que nuestras seleccionadas tocaran la gloria nuevamente, pues México no vencía a las acérrimas rivales desde aquel 2018 en que se definió todo en tanda de penales. Recordemos que las últimas veces que se enfrentaron en este torneo fue con un resultado de 2-0 en la edición del 2022, precedido por un 4-1 en la edición del 2020.
En esta ocasión fue una final brillante con jugadoras como Alice Soto e Itzel Velasco, quién atajó un penal e intervino en un tiro de último minuto; o Tatiana Flores, que estuvo por todo el campo y puso una asistencia y ni qué decir del torneo de Hailey Joy Gordon, que sin sus goles y asistencias llegar a la final no hubiera sido posible, por mencionar a sólo unas cuantas.
Esta generación se está acostumbrando a ganar y a jugar en equipo, a entenderse en complicidad y crear la magia dentro del campo, están siendo el resultado de la continuidad en los procesos. Su presente es brillante pero el futuro puede ser espectacular.
Las jugadoras de esta Selección ganaron más de lo se pueden imaginar, nos están regresando la esperanza de que el futbol femenil en México va en vías de crecimiento y de que tenemos oportunidad de destacar a nivel internacional.
Gracias a ellas que todo este torneo jugaron con alma y corazón hasta alcanzar la meta, porque la esperanza de un buen futuro en el fútbol femenil mexicano… es hoy.