Lizbeth Ovalle: Magia

Por: Karen Flores, Naim Gallegos, Brenda Möller


Lizbeth Jacqueline Ovalle Muñoz nació el 19 de octubre de 1999 en Aguascalientes. Su historia es sumamente particular, pues aunque compartía equipo de fútbol con su hermano, no era algo que le llamaba la atención. Además, su hermano le decía que “no podría jugar fútbol”, lo que la llevaría a querer demostrar lo contrario y ser mejor que sus oponentes.

Cuando empezó a exhibir que efectivamente tenía un talento superior a los demás, llegó su oportunidad para ser parte de la Selección Sub 16 de Aguascalientes, lo que le abriría las puertas de la Selección Nacional.

Fue convocada en 2016 al Campeonato de la Concacaf Sub 17 en Granada, con miras a ganarse el boleto para el Mundial y posteriormente sería parte de la selección que asistió a la Copa Mundial Sub 17 en Jordania del mismo año, en donde marcó dos anotaciones y destacó por sus cambios de ritmo y habilidades con el manejo del balón.

Una vez que la Liga MX Femenil se creó, fue una gran noticia para ella y para todas las jugadoras que venían construyendo su camino en el fútbol femenil. Su talento hizo que varios equipos quisieran sumarla a sus filas, incluso estuvo cerca de ser jugadora de Tuzas, pero una lesión le impidió asistir a las visorías y más adelante las Rayadas de Gustavo Leal le ofrecieron estar en el proyecto al mismo tiempo que Tigres. Su decisión ya la sabemos y no se arrepiente de haber elegido a las de la U, pues desde entonces ha cosechado títulos y ha impuesto récords con las universitarias.

Ha ganado cuatro títulos de liga, un Campeón de Campeones, registra 134 partidos disputados - 125 de ellos como titular - suma 55 goles y 14 de ellos han sido en liguilla, lo que la hacen una pieza fundamental para el equipo, pues es la segunda mejor anotadora de la institución, gran asistidora y talismán para las Amazonas, pues si anota en la Final de vuelta, Tigres levanta el título.. Su visión de campo, regate, técnica y disparo de media distancia le han hecho ser una jugadora desequilibrante y un serio dolor de cabeza para las rivales, lo que le ha hecho ganarse el título de “La Maga”, mote que al parecer nació en 2018 impulsado por la cuenta @LOvalleTeam y que la afición tigre adoptó desde entonces. 

En el combinado nacional siguió su proceso al participar en la Copa de la Concacaf en Trinidad y Tobago de 2018, donde anotó gol frente a Jamaica y fue parte importante del equipo que le ganó a Estados Unidos el campeonato por primera vez en la categoría. Posteriormente participó en la Copa Mundial Sub 20 en Francia de 2018, torneo en donde marcaría un golazo frente a Brasil y el cual fue seleccionado como el mejor de la competencia.

Tras su participación, recibió ofertas de clubes europeos y de Estados Unidos, sin embargo declaró que aunque salir al extranjero es una de sus metas, mientras tuviera contrato con Tigres, estaría enfocada en su club. Finalmente, terminó firmando por dos años más con las Amazonas, pero después de este proceso mundialista, no descarten que vuelva a estar en el foco de los fichajes.

Su debut en Selección Mayor llegaría en 2018, cuando fue convocada por Roberto Medina, entonces DT del tricolor, para enfrentar a la poderosa escuadra francesa, entrando de cambio al 84’ por Katie Johnson. Fue parte del equipo que jugó las eliminatorias para el Mundial de Francia 2018, pero no pudieron conseguir el boleto.

Una nueva oportunidad llegó cuando fue llamada a la Copa Chipre 2019, anotando su primer gol con la Selección Mayor frente a República Checa, quedando registrado en su memoria ese 6 de marzo de 2019. Asistió a los Juegos Panamericanos en Lima de 2019 y al Campeonato Preolímpico de la Concacaf, donde se quedaron en la orilla sin poder conseguir boleto para Tokio 2020. A pesar de las adversidades, Ovalle no se da por vencida. Sin importar los resultados, siempre ve hacia adelante y se enfoca en lo quiere alcanzar.  

Ovalle es una jugadora diferente, su explosividad y técnica la hace destacar del resto. Es una de las futbolistas que hemos visto crecer y madurar desde el arranque de la liga y que en Selección Nacional ha demostrado que tiene lo necesario para ser determinante. En este nuevo proceso sumará su talento al tricolor para llevarnos a Australia-Nueva Zelanda, así que preste atención cuando juegue, porque si parpadea se puede perder la magia que sale de sus pies.


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