Los minutos de menores: ¿Cómo van los equipos?
Con la finalidad de ser semillero para Selecciones Nacionales, la Liga MX Femenil cuenta con la llamada “Regla de Menores”, que consiste en que cada equipo de la liga debe cumplir con 1,000 minutos de jugadoras nacidas a partir del 1º de enero de 2003 al 31 de diciembre de 2006.
¿Cómo se contabilizan?
Los equipos pueden sumar hasta 180 minutos por partido, sin importar cuantas jugadoras jóvenes sean alineadas, sin embargo, estos minutos no son acumulables. Cada jugadora nacida del 1° de enero de 2004 al 31 de diciembre 2006 contará el 100% de los minutos jugados y aquellas nacidas del 1° de enero al 31 de diciembre de 2003 contará el 50% de los minutos jugados como máximo.
Si bien, varios clubes han visto esto como una oportunidad para desarrollar a jugadoras Sub-18, otros han tenido problemas para cumplir esta regla, ya que tienen a jugadoras que sólo les aportan el 50% de los minutos o algunos rara vez usan a alguna jugadora dentro de estos rangos de edad. El problema es que si al final de la temporada regular no alcanzas los 1,000 minutos, al equipo se le descuentan tres puntos del total obtenido, lo que puede cambiar dramáticamente la posición en la tabla y ser la diferencia entre cerrar fases de liguilla en casa o de visita.
Si bien, Pachuca, Querétaro y Tigres son los equipos que acumulan más minutos gracias al tiempo de una jugadora en el campo, no necesariamente significa que están cerca de llegar al objetivo. Por el contrario, depender de una jugadora puede ser un problema, especialmente si se lesiona, si la expulsan o simplemente si ya no te suma el 100% de minutos, pues ni siquiera teniéndola de titular en todos los partidos podría al alcanzar el número requerido.
Mazatlán es la escuadra que hasta este momento tiene la menor cantidad acumulada, pues sólo ha sumado 304.5 minutos, siendo Lizeth Chula la que más minutos aporta a la causa y tendrán que empezar a alinear a jugadoras menores si no quieren que les descuenten tres de los cuatro puntos que han ganado hasta ahora.
Tigres es otro equipo que en general no se caracteriza por tener a muchas jugadoras jóvenes en la cancha y en Jana Gutiérrez parecía que habían encontrado la solución a sus problemas, sin embargo, a partir de este año sólo suma la mitad y eso complica la situación de las Amazonas, pues tendría que empezar a echar mano de otras jugadoras para no perder tres puntos al final de la temporada regular.
Las Bravas de Juárez han hecho un torneo espectacular, pero que si no empieza a buscar alternativas, podrían perder lugares importantes si no consiguen los 1,000 minutos, pues Emili Bautista es quién más minutos acumula, pero aunque tiene seis partidos de titular, sólo suma la mitad de lo generado.
Por otro lado, Necaxa, Atlas, León, Toluca y Pumas ya han superado los 1,000 minutos y apuntan a rebasarlos con creces, pues apenas nos encontramos a la mitad del torneo. Necaxa ha superado la meta con facilidad, pues, al margen de las deficiencias que ya conocemos, la apuesta que han hecho desde el inicio de la Liga es hacia las visorías y el descubrimiento de jugadoras jóvenes. Caso similar de León, que si bien en los últimos torneos ha buscado talento en el extranjero, las jugadoras jóvenes han tenido un papel importante en la institución esmeralda y eso les ha permitido que en este torneo, ya hayan cumplido con la regla.
Atlas, por su parte, tiene una Directora Técnica que sabe perfecto lo que es captar talento y desarrollarlo, pues Fabiola Vargas hizo lo propio en su paso por las Centellas y hoy al mando del conjunto jaliciense, ha equilibrado su 11 titular con experiencia y juventud y al día de hoy registran ya 1,363 minutos.
El objetivo de la Liga se ha cumplido poco a poco. La llegada de la categoría Sub-17 y ahora Sub-18 ha ayudado a mantener a esas jugadoras en competencia, que poco a poco maduren en su desarrollo y, aunque algunos equipos todavía tienen mucho camino por delante respecto a lograr integrar jugadoras jóvenes a sus planteles de primera división, también es cierto que quienes mejor lo hacen es quienes tienen en su modelo institucional el desarrollo de jugadoras de cantera antes que tener fichajes bombas. Al final del día, no sólo tenemos que ver que clubes cumplen con la regla de manera rápida, sino quienes lo hacen de forma eficaz al mantenerse en un nivel altamente competitivo.